Semillas nativas: La milpa  

En el Centro Cultural de España en El Salvador abrimos nuestra programación de julio mirando a la tierra y sus frutos. El jueves 3, a las 10:00 a. m., invitamos a participar en «Semillas nativas: La milpa», la segunda charla del ciclo sobre especies nativas y semillas criollas en El Salvador y Mesoamérica que inauguramos el pasado mes de mayo hablando del ojushte.

En esta ocasión será Silverio Morales, de Nahuizalco, quien nos acompañe a conocer la milpa como sistema agrícola tradicional propio de la región mesoamericana. Morales, integrante de la Asociación Indígena de Pueblos Ancestrales, aplica la siembra de la milpa desde hace casi 45 años como parte de su herencia cultural familiar.

Más allá del maíz como cultivo principal, en la milpa se agrupan simultáneamente y en el mismo espacio otras plantas como el frijol y el ayote, una cualidad que se conoce como policultivo. Esta coincidencia de cereales, legumbres y verduras permite aprovechar los nutrientes, el agua y el cuido de la siembra, con numerosos aportes para la sostenibilidad ambiental.  

Asociar cultivos en la milpa crea un ecosistema dinámico en el que las plantas se benefician mutuamente y aprovechan el agua y los recursos del suelo de manera más eficiente. Al mismo tiempo promueve la diversidad de las especies, lo que contribuye a la seguridad alimentaria y a la biodiversidad. 

Además, la milpa, como práctica profundamente arraigada en la cultura de muchas comunidades indígenas y campesinas, es un símbolo de identidad, tradición y sustento.